El verano suele ir acompañado de buen tiempo, viajes a destinos más o menos lejanos y sobremesas en las que se pausa el tiempo. Y si juntamos todo eso tenemos una excelente ocasión para degustar algunos de los postres más típicos de distintas latitudes del planeta y, de paso, combinarlos con un mini cubano.
Hablando de verano y postres, lógicamente tenemos que comenzar por el gelato italiano, más denso que el helado convencional y elaborado a base de crema. Sin salir del país de ‘la bota’, el clásico tiramisú -bizcocho empapado en café con crema de mascarpone y cacao en polvo- es una opción perfecta al servirse frío.
En España, aunque no desaparecen de la carta postres tradicionales, los días de calor se agradecen con opciones más frescas, desde el helado de turrón hasta la horchata valenciana. Te proponemos combinarlo con un Cohiba Wide Short, un mini cubano con fortaleza de suave a media.
Ya en la frontera europea tenemos el famoso yogur con miel y nueces o el baklava, que también reina en Turquía y en otras regiones de Oriente Medio, una deliciosa masa filo crujiente, con pistachos y un baño de almíbar con miel. No es exclusivo del verano -lo sabemos -, pero si viajas por la zona estas vacaciones no dejes de probarlo.
Por su parte, Japón nos permite disfrutar del kakigori, una especie de bola de hielo raspado acompañado de sirope, leche condensada o té matcha. Otra opción es un mochi, una pequeña bolita fría de arroz que tradicionalmente se rellenaba de anko -una pasta de judías rojas-, pero que ahora se encuentra de sabores como chocolate, frutas o té. Y para opciones tan exóticas como estas te recomendamos Partagás Serie Mini, con aroma intenso y toques sabrosos y dulces, que en el paladar forman una sinfonía de maridaje.
Las frutas, con variaciones según el país, son las protagonistas de buena parte de los postres en América: tartas o gelatinas de frutas en EE. UU., de lima o arándanos, por ejemplo; açaí na tigela en Brasil; o los biónicos, una ensalada de frutas bañada en crema original de Guadalajara (México) y que se ha colado en el ranking de los mejores postres del mundo según ‘Taste Atlas’.
No nos podemos olvidar del pastel tres leches, típico en América Latina, un bizcocho empapado de leche evaporada, condensada y crema de leche que se consume frío -directamente sacado de la nevera-, lo que lo convierte en una opción perfecta para días calurosos. Al ser un postre bastante dulce resulta ideal para combinar con un cigarrito suave como Guantanamera Minutos o, si tienes un poco más de tiempo para la sobremesa, puedes disfrutarlo con un Guantanamera Décimos.
Esta vuelta al mundo podría continuar, pero después de semejante paseo por el lado más azucarado de la gastronomía nos vemos obligados a parar, pedirnos un postre, encendernos un mini cubano y dejar que el humo se mezcle con los sabores dulces. ¡Que aproveche!